La Feria de Ciencias forma parte de la experiencia institucional desde hace más de 20 años, atravesando los 3 niveles. Para la comunidad educativa es una oportunidad de aprendizaje impresionante; un aprendizaje participativo, proactivo, colaborativo y entregado a construir significados.
Cada aula se pone a investigar y resignifica lo aprendido dejándose atravesar por experiencias inusuales. Desde ese lugar, fuerza la creatividad y el aprendizaje pierde sus fronteras habituales. Nos convertimos en protagonistas y visitantes al mismo tiempo. Es siempre un estímulo para salir de la rutina del habitus escolar; planteando, a través del trabajo por proyectos, problemas genuinos que empujan los límites de lo posible en un espacio escolar.
La Feria es sinergia, es cooperación. Activa todas las inteligencias y, de manera natural y casi como es la vida, se atraviesan los conflictos y se superan los errores, aprendiendo de ellos.
La Feria es una excusa para despertar la ilusión de construir juntos nuevos textos, diálogos, miradas y sentires, desde la expresión de la diversidad… de identidades, de familias, de saberes, de objetivos, de trayectorias, de deseos, de intereses, de escuelas, de estéticas, de sueños, de expectativas, de pasiones, de mitos, de sentidos.
Es imprevisible, siempre. Es espejo de época, deseos de cambio y deseos de acuerdo.
La Feria es una experiencia basada en las ganas de mostrar lo que orgullosamente hacemos en la Escuela, de comunicar y encontrarnos, permitiéndonos descubrir que lo que imaginábamos saber se rompe y se rearma con esas nuevas e inesperadas preguntas. Porque más que nunca esa mirada completa el proceso. Se monta pensando en facilitar la comprensión del que viene a visitarnos… un colectivo diverso que nos obliga a encontrar el mejor diseño, garante de que lo más importante ha queda dicho… y ha quedado abierto.
Hace click en cada imagen para conocer más sobre la Feria, año a año desde sus comienzos…